Actividad industrial tiene primera caída en más de tres años arrastrada por la construcción

Francisco Rivera

La actividad industrial en México tuvo en agosto su primera caída a tasa anual en más de tres años, arrastrada en parte por la contracción en el sector de la construcción.

El indicador retrocedió 0.3%, el primer dato negativo desde febrero de 2021, cuando la contracción fue de 3.1%, de acuerdo con cifras desestacionalizadas del Inegi publicadas este viernes.

Al interior de la actividad, la construcción cayó 4.1%, la primera caída desde octubre de 2022 (1.1%) y la más profunda desde enero de 2021 (8.7%).

La minería se contrajo 1.3% y sumó 10 meses con retrocesos a tasa anual.

En tanto, las industrias manufactureras subieron 0.7% y la generación, transmisión, distribución y comercialización de energía eléctrica, suministro de agua y de gas natural por ductos al consumidor final avanzó 2%.

“El sector de la construcción se vio favorecido por la inversión en obras públicas del gobierno de López Obrador. Estas obras causaron gran controversia por el incremento en su costo vs lo presupuestado”, destacó en un análisis el grupo financiero Base.

“Por lo anterior, será relevante en el Paquete Económico 2025 el tipo de gasto en inversión física, pues, además, el sexenio anterior terminó con
una caída en este tipo de gasto, algo que no se presentaba al menos en los últimos cuatro sexenios”, agregó.

Respecto al mes previo, la actividad industrial retrocedió en agosto 0.48%, la primera caída luego de tres meses al hilo con avances.

Al interior, la construcción cayó 3.7%, la contracción más profunda desde el 4.8% de septiembre de 2023.

La generación, transmisión, distribución y comercialización de energía eléctrica, suministro de agua y de gas natural por ductos al consumidor final subió 1.4%, las industrias manufactureras avanzaron 0.3% y la minería, 0.1%.

Según Base, la actividad industrial del país enfrentará varios desafíos, entre ellos la desaceleración de la actividad industrial de Estados Unidos, un recorte del déficit presupuestario en México, cautela por las reformas recién aprobadas, tasa de interés en México en niveles aún restrictivos, la relación entre el gobierno de Claudia Sheinbaum y el sector privado, y el proceso electoral en Estados Unidos.