Juan Martín Morales: busco un nuevo modelo sindical para los petroleros

Alán Rodríguez

“Nuestro sindicato está secuestrado”, indica Juan Martín Morales Barrera, candidato a Secretario General del Comité Ejecutivo General (CEG) del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, (STPRM). Hoy somos quienes abanderamos una transición en el Sindicato, lo que incluye profesionalización y cambio de cultura necesarios.

Puntualiza que cree más en enfocarse al futuro, a las propuestas, que en quedarse congelados en la revisión del pasado.

Perteneciente a la sección sindical 30 con sede en Poza Rica y psicólogo de profesión, Juan Martín afirma que en el sindicato petrolero desde hace décadas se ejerce un pleno abuso de poder, nepotismo, corrupción, malos manejos y “abusos sistemáticos” que pisotean la dignidad de los trabajadores petroleros.

“El sentido de pertenencia se ha perdido. Ya no existe orgullo por ser petrolero”, sentencia en entrevista para Crónica, y reclama la necesidad de que el sindicato petrolero sea un espacio seguro para el gremio y sus familias.

“Vengo de la tercera generación de petroleros en mi familia y hemos vivido el abuso, hemos vivido la carencia, hemos vivido incluso la persecución como personas que pensamos de manera diferente”, agrega. Su perfil, aclara, es de un trabajador operativo, con años luchando por lo que hoy sostiene como aspirante. 

Juan Martín asegura que él y los suyos no son el único caso. “Cada vez que voy a las secciones, cada vez que tenemos reuniones con compañeros nuestras historias son semejantes”.

El STPRM está próximo a realizar su proceso electoral para elegir al Secretario General del CEG y a sus integrantes. Según refiere Juan Martín, el actual titular, Ricardo Aldana Prieto, adelantó el proceso electoral de las 36 secciones sindicales buscando así una reelección.

“Existe miedo de la cúpula actual de precisamente perder el dominio del sindicato”, dice el también trabajador de planta sindicalizado con 23 años de antigüedad, y aclara que de acuerdo al estatuto las elecciones primero tienen que ser nacionales y después locales. De ahí que el prematuro llamado a elecciones por parte del actual secretario general se interprete como un intento por procurar su permanencia en el puesto.

Fuerza Oro Negro

El proyecto de campaña que abandera la candidatura de Juan Martín es Fuerza Oro Negro, el cual en esencia apunta hacia a un nuevo modelo sindical. “El proyecto que estamos encabezando habla precisamente de una transformación cultural, desde el factor humano específicamente”.

El cambio en la cultura sindical, de acuerdo con Juan Martín, requiere de instrumentar medidas para la profesionalización de los funcionarios. Por eso “una de propuestas directamente de nuestro proyecto apuntan a que debe de existir un perfil para todo aquel trabajador que quiera ser funcionario sindical”, asegura Juan Martín.

De ahí que Fuerza Oro Negro impulse una caracterización de puestos de manera profesional para que aquel trabajador cumpla con todo un perfil psicosocial y curse un plan de carrera interno.

Agentes de cambio

Esta disruptiva propuesta para manejar los hilos sindicales del sector petrolero contempla la participación no de propiamemte líderes sino de “agentes de cambio”, asegura Juan Martín.

“Nosotros le apostamos más al concepto del agente de cambio. Lo que significa que todo trabajador que quiera aspirar a un cargo sindical, local o nacional, debe pasar por un proceso de certificación interno y de ahí a una incubadora de agentes de cambio”.

Resulta esencial que el agente de cambio sea una persona que genere espacios de crecimiento. “Estamos trabajando bajo este enfoque de incubadoras y agentes de cambio. De las premisas, es fundamental como número uno, creer que las cosas pueden cambiar; dos, estar convencido de que mi función básica es generar que los espacios para que los demás se desarrollen en todos los sentidos”.

La noción de capacitación que Juan Martín, y que ya ha podido implementar, promueve un enfoque en las cualidades y no en los defectos de los trabajadores. “Lo curioso del caso es que cuando empezamos a trabajar con la parte positiva de las personas, se fue haciendo así, sin necesidad de tocar la parte opuesta, lo negativo, los defectos”, comenta. Así, partiendo de un proceso de capacitación tradicional “traspasamos las barreras y empezamos a generar estos agentes de cambio”.

Juan Martín también aclara que el Proyecto de Fuerza Oro Negro es uno que han construido “entre todos” y sobre todo, que no es un proyecto terminado. “Creo que todo está sometido a la mejora continua”. Y sugiere que a nivel sindical un proyecto de esta naturaleza, “no existe”.

Desafíos y violación de derechos

Parte del gremio petrolero enfrenta serios problemas que afectan seriamente su calidad de vida, asegura el candidato a la secretaría general del CEG, y que sostiene deben atacarse de inmediato: adicciones, inequidad de género, problemas psicológicos, falta de accesibilidad a sus derechos como trabajador.

“Por ejemplo, si quieres que te den tu casa o tu crédito hipotecario tienes que pararte a las 4 de la mañana e irte a la casa del líder sindical para formarte desde la entrada, con unas colas interminables que dan vuelta a la cuadra para que el líder salga por ahí de las 7 u 8 de la mañana. Abre la puerta y te salude”.

En el caso de las trabajadoras, muchas son violentadas o sufren de acoso sexual, afirma el pozarricense. “Por ejemplo, muchas se ven obligadas a convertirse en amantes de funcionarios para que les den contratos de un mes”.

Los problemas de salud mental, que además se dispararon a raíz de la pandemia por covid-19, suponen otra complicación y “no existen programas institucionales que atiendan esta problemática que atenta contra la calidad de vida, la seguridad, la productividad y todo”. De ahí que Fuerza Oro Negro proponga instaurar centro de atención para la salud mental de los trabajadores y sus familias.