Inestabilidad política comprometida. Sinaloa en peligro

Alfonso Carlos Ontiveros Salas

Ante la ola criminal que azota a Culiacán y Sinaloa, los sinaloenses se sienten abandonados. Crisis de inseguridad y terror ciudadano.

No hay autoridades que se pronuncien para dar confianza al ciudadano. Un Congreso insensible que prefiere enconcharse en un conflicto estéril contra la Universidad Autónoma de Sinaloa, que exigirle al gobernante que se apliquen las medidas necesarias para parar esa ola criminal que azota cruelmente a Culiacán.

La sociedad está desesperada y se le perdió el respeto al gobernador Rubén Rocha Moya. Hay un vacío de poder y una autoridad perdida para dar certidumbre a una población desamparada. La avalancha criminal golea sin cesar. Víctimas inocentes empiezan a caer.

La prensa comprometida con el gobierno no es mucho lo que ayuda. Las notas periodísticas ocultan muchos datos de una realidad que impera en la calle y en la ciudad. Los enfrentamientos entre grupos criminales no se fueron a campo abierto se quedaron donde más daño pueden hacer.

El estado incendiándose con la violencia y el Gobernador fuera de Sinaloa. La gente desesperada ya le pide la renuncia. El Estado está al garete, no se ve la mano firme que ponga en paz a esa horda criminal
El temor ciudadano es terrible, hay miedo para salir a la calle, pero muchos lo deben hacer porque tienen que arriesgarse para ir al trabajo y a la escuela. El problema está presente, no hay condiciones para obligar a los padres de familia llevar a sus hijos a la escuela. El riesgo de toparse con un enfrentamiento es una realidad y eso la sabe el gobierno. Las balas asesinas ya tocaron a víctimas inocentes.

Que desastrosa ha sido la fecha del 25 de julio, esa que recuerda una traición y un homicidio. La traición exige reacomodos y los grupos con poder se los disputan. La traición es la causa de la inseguridad que pone en llamas a Sinaloa.

La violencia está en las calles, en las colonias y en todos lados del Estado y en Culiacán. Muchos soldados, pero no detienen los daños que le causan a la población ¿Cuánto tiempo habrá que esperar? ¡Queremos paz! se grita por todas partes.

Que perversidad e insensibilidad del gobierno. Mientras los criminales violentan a placer la tranquilidad ciudadana y ocasionan víctimas inocentes, en el Congreso los diputados de Morens prefirieron golpear políticamente a la Universidad Autónoma de Sinaloa reformándole su Ley que a todas luces les habrá de tronar por ser ilegal y también inconstitucional. El pueblo que siga sufriendo la calamidad de la violencia.

Lo inadmisible y ruinoso es el proceder de unos diputados que le dieron la espalda al pueblo priorizando un conflicto que la seguridad de los demás. Les importó un cacahuate presenciar cómo se iluminaba el cielo culiacanense con las balas arteras y asesinas, una perversidad política que lo tendrán que pagar.

La inestabilidad política del gobierno está a la vista. Es tanto el malestar, que muchos le piden al gobernador que renuncie. Lo empinaron en una aventura que no le aportaría ninguna utilidad. Perseguir políticamente a la Universidad Autónoma de Sinaloa, puede ser el Waterloo de su gobierno.

Lo ocurrido el 25 de julio pasado es el estigma que lo sigue. Las actuaciones que realizó la Fiscalía estatal lo están perjudicando. Los involucrados en integrar la carpeta de investigación cometieron demasiados errores. Están asustados y vienen en cascada las delaciones en contra de los que pueden ser los responsables ¿Sunami en la Fiscalía estatal?

Llamó la atención aquello de que la UAS ya no tenía quien la defendiera, que había quedado sin dirección y desprotegida ¿Por los hechos ocurridos el 25 de julio? El liderazgo en la UAS es tan fuerte y estabilizador que ni aun con la amenaza de la remoción del cargo del Encargado de la Rectoría podrán arrodillar a la UAS.

La Universidad Autónoma de Sinaloa tiene una historia de lucha que la respalda y hará frente con todo y con las consecuencias que pudieran venir. Reconsidere seguir con el conflicto contra la UAS, la violencia desatada no lo dejará en paz.