En migración, México adoptó una política militar

Eloy Linares

Al alinearse a la postura migratoria de Estados Unidos, el gobierno mexicano estableció una política militar que desatendió las necesidades humanitarias de la población en movilidad, consideró el extitular del Instituto Nacional de Migración, Tonatiuh Guillén López.

Tonatiuh Guillén explicó que ante los discursos xenófobos y las amenazas de un aumento a los aranceles que hizo Donald Trump, México adoptó medidas de contención migratoria.

“Ese gran cambio nunca se rectificó, hubo eventos muy graves como el del crimen en la estación de Ciudad Juárez, donde murieron 50 personas, y que no motivaron ningún cambio de la política migratoria. Nunca se le dio relevancia a la protección de los derechos humanos”.

Director del Instituto Nacional de Migración durante un breve periodo al comienzo del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el académico y especialista en migración tenía el objetivo de modificar el trabajo y la cultura de esa institución.

Pero la administración, a fin de cuentas, siguió la línea trazada por Estados Unidos y se abandonó a la población extranjera que busca llegar a Estados Unidos.

Volvió el éxodo de mexicanos

Durante los años en que aumentó la población en tránsito por México también volvió a presentarse un fenómeno que casi había desaparecido: miles de personas salieron de Chiapas, Guanajuato, Guerrero, Oaxaca, Michoacán y en Zacatecas para llegar a Estados Unidos, principalmente por temor a la violencia.

Cifras del departamento de Aduanas de Estados Unidos muestra que en 2021 agentes de la Patrulla Fronteriza detuvieron a 192 mil ciudadanos mexicanos que cruzaron la frontera sin autorización. En 2022 la cantidad subió a 227 mil 547 personas y en 2023 llegó a 269 mil 735, un crecimiento de 40 por ciento en tres años.

La poca atención hacia el fenómeno migratorio influyó en tragedias, como la de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, en la que 55 migrantes murieron al volcarse el camión en el que viajaban, el 10 de diciembre de 2021.

“El tráfico de persona es un viejísimo asunto que ha crecido como nunca. Mientras no haya estrategias de combate, vamos a seguir teniendo tragedias y explotación de personas”, expresó.

Caravana migrante: Cuartoscuro

En este periodo, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) quedó rebasada por la gran cantidad de personas que requerían atención, pero el presupuesto quedó estancado.

Guillén decidió renunciar a su cargo como comisionado del Instituto Nacional de Migración (INAMI) en junio del 2019 debido al cambio de la política migratoria, que abandonó un enfoque de protección a los derechos humanos para enfocarse en la contención y la persecución.

“Cambió la política de reivindicación de derechos humanos y de promoción de desarrollo, se pasó a un acuerdo con Estados Unidos de militarización y de contención que llevó a un maltrato creciente con violencia graves contra la población migrante. Ese cambio era completamente ajeno para mí, no iba estar en eso”, expresó.

Caravana migrante: Cuartoscuro