La «Unión Free» es una realidad ante desaparición de más del 80% de los contratos colectivos

María del Pilar Martínez

Para las empresas la reforma laboral de 2019 dejó de impactar de manera importante y ha sido posible advertir que tampoco se registró un incremento en el número de organizaciones sindicales orgánicas, a pesar de la desaparición de más del 80% de los contratos colectivos de trabajo; lo que hace evidente que la “Unión Free” (no sindicalización) es una realidad, coincidieron especialistas.

Jaime Bustamante, socio de la práctica Legal en Deforest México, comentó en entrevista que “hay dos razones que no permitieron que se detonara un crecimiento en el número de sindicatos: la primera tiene que ver con que los trabajadores no tienen interés en ser representados, y en el segundo caso es porque las empresas han establecido desde 2019 mejores estrategias para atender las necesidades de los trabajadores, lo que hace que no tengan necesidad de acudir a una representación sindical”.

Datos del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL) indican que desde el año 2020 y hasta la fecha se han otorgado 1,420 registros sindicales. En tanto, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) ha informado que la tasa de sindicación apenas se ha movido, al pasar de 4.25 millones de trabajadores sindicalizados a 4.98 millones.

“Las empresas se han enfocado a establecer estrategias a través de las cuales se atiendan las necesidades de los trabajadores de una mejor manera, y se cumple con las obligaciones legales y contractuales en beneficio del trabajador, y ello está generando que no exista el incentivo o el gustito por buscar el apoyo de alguna organización sindical para hacer valer sus derechos laborales”, detalló Bustamante.

Más requisitos y exposición de datos para los sindicatos

Otra de las razones por las que no hay un “boom sindical” en el país es porque hay más reglas, y no ha sido fácil para los trabajadores dar cumplimiento.

Humberto Ruíz Correa, abogado senior de la práctica laboral y compensaciones de Baker Mckenzie Monterrey destaca que “se buscó -con la reforma- democratizar más los procedimientos para registro sindical; pero, originó más reglas y no ha sido fácil para muchas organizaciones cumplir con esta serie de nuevas obligaciones”.

A lo anterior, se suma el hecho de que sindicatos de antaño que cuentan con mayor infraestructura y know how “forman parte de federaciones y confederaciones para poder brindar beneficios y atención a sus miembros, lo cual es un incentivo para que voten favorablemente ya sea para registrar un contrato o para votar las revisiones integrales a los contratos ya existentes”.

Añadió que eso ha sido aprovechado por las áreas de recursos humanos, “el Unión Free es algo que ahora esa una realidad en México y hay muchísimas empresas que, tras tener contratos colectivos blancos o inactivos, ahora han fortalecido sus áreas de RRHH y están más cerca de los trabajadores, a lo que se suma la revisión de compensaciones y beneficios para que los trabajadores estén agusto, eso ha hecho que haya disminución o pérdida de interés de tener un sindicato que abogue por ellos”.