Las propuestas de educación superior que esgrimieron durante su campaña los candidatos del Redes Sociales Progresistas, Movimiento Ciudadano y el PRI-PAN-PRD, no son propuestas, ya que carecen de fundamento legal y rayan en la falsedad; son agresiones que incitan a atentar contra las autonomías universitarias y acabar con la estabilidad académica y laboral de las instituciones.
La candidata de RSP, Yolanda Yadira Cabrera, encajonó su discurso electorero “altamente tonto, sin sentido” al “rescate” de la Universidad Autónoma de Sinaloa, institución que ha dado sobradas muestras de su crecimiento y armonía institucional. Es vergonzoso que una dama haya dispersado en la jornada electoral tantas sandeces, mentiras y perversidades, solamente para ganar votos.
Cuando menos tres universidades de Sinaloa son autónomas: la UAS; la UAIM y la UADO; ellas mantienen regímenes internos autónomos por mandamiento de ley. Su destino no se rige por un proceso electoral externo, sino por las deliberaciones y acuerdos de su máximo autoridad, el Consejo Universitario y sus órganos colegiados. Es su vida interna no tienen injerencia ni diputados, ni alcaldes ni gobernadores.
Es un “pendejismo” convocar a la sociedad, a los no universitarios, a los electores, incluso a los jubilados, a “rescatar” a la UAS cuando ninguna ley los faculta a entrometerse en la vida interna de la Casa Rosalina; es mayor la estupidez cuando proviene de la candidata de Redes Sociales Progresistas, el partido de la maestra Elba Esther Gordillo, enriquecida a costillas de los profesores federales. La Gordilla secuestró por muchos años el SNTE; es una mujer altamente corrupta.
Nada bueno puede traer a las universidades y al sistema de educación primaria, secundaria y preparatoria del país, un partido creado por los apetitos políticos y económicos de Elba Esther Gordillo Morales repudiada por cientos de miles de profesores del país.
En el caso de Sergio Torres Félix, “El Morrín”, también fue altamente tonta su arenga de “rescate” de la UAS para ver si cacha algunos votos, pues con su posición mandó la lectura de su disposición a atentar contra la autonomía de la UAS.
Mario Zamora Gastélum actuó peor. En sus discursos mandó la señal de su odio a todo lo que huela a Educación Pública Superior. El candidato del PRI-PAN-PRD agredió a los universitarios, insultó su inteligencia y realizó montajes para desacreditar al alma mater, tan solo para ir a la caza de los votos de los académicos, administrativos y los alumnos mayores de edad.
La lectura que mandó Mario Zamora es que, atentando contra la autonomía de las Universidades, podría desaparecer a la UAS, a la Universidad de Occidente y a la Universidad Autónoma Indígena de México para dar paso a la creación de más Universidades Privadas.
El montaje que realizó para criminalizar a universitarios con el fin de posicionar su imagen y aparecer como víctima de una “guerra sucia” reveló los hígados negros de Mario Zamora, lo que indica que está dispuesto a todo con tal de conseguir votos para llegar a la gubernatura.
Ninguno de los candidatos al gobierno de Sinaloa, salvo el candidato del Morena-PAS, Rubén Rocha Moya, fijó en su campaña una agenda universitaria viable, la cual permita solucionar los problemas estructurales de las casas de estudio y las ayude a solventar el pago de las jubilaciones dinámicas. Rocha dio sobradas muestras de que si conoce la problemática de las Universidades y sabe lo que necesitan para seguir creciendo.
Las Universidades Públicas Estatales de Sinaloa necesitan un gobierno que respete sus autonomías, que les ayude a obtener los presupuestos para atender los programas de obligatoriedad y gratuidad de la educación y que permitan darle mayor impulso a la ciencia, la cultura, las artes y adentrase cada vez más en las tecnologías de punta.
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Los Zamora lucran con la educación; abrirán Universidad privada en Los Mochis
Texto de la nota:
La agresión a la Universidad Autónoma de Sinaloa bajo la figura de “rescate” de la institución que agarró como bandera electorera el candidato del PRI-PAN-PRD al gobierno de Sinaloa, Mario Zamora Gastélum, enmascara la mayor amenaza a la educación como bien público, gratuita e igualitaria, y pretende frenar la expansión universitaria de la UAS y de la Universidad “Benito Juárez” del presidente Andrés Manuel López Obrador, las dos con planes de crecer en el norte de Sinaloa.
El propósito de la arenga electoral tiene como propósito “parar en seco el sistema de educación pública” en Sinaloa y privilegiar la comercialización y privatización de la educación y favorecer la construcción de la Universidad privada de la familia Zamora.
Las diatribas buscan mermar el avance electoral del candidato del Morena-PAS, Rubén Rocha Moya, porque representa para la Universidad Autónoma de Sinaloa la certeza del apoyo para su crecimiento y que no quede ningún estudiante sin acceso a la educación preparatoria y sin cursar alguna carrera profesional.
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La posición anti-Universitaria de Mario Zamora es también un “atentado directo” a la Universidad “Benito Juárez”, cuyos directivos reciben solicitudes de los padres de familia para que abra planteles en el puerto de Topolobampo y en municipio de El Fuerte para capacitar profesionistas en el ramo de la pesca científica o de alta tecnología y la ganadería de alto registro.
Las dos Universidades, la UAS y la “Benito Juárez” constituyen un obstáculo para el crecimiento del Colegio Mochis y del Instituto de Estudios Superiores de Los Mochis, A.C., propiedad de la familia Zamora Malcampo/Zamora Gastélum.
El clan familiar, origen de Mario Zamora, candidato del PRI-PAN-PRD, planea abrir una Universidad privada en Los Mochis para continuar lucrando con la educación y socavar la educación pública y perjudicar los intereses de la sociedad. El objetivo de la educación universal de calidad gratuita para todos debe ser parte central de cualquier agenda de gobierno, local, estatal o federal, pero la educación pública va contra los intereses y “valores” de la familia Zamora.
La mercantilización o el lucro con la educación ha convertido a la familia Zamora en millonaria. Fundado por un grupo de ciudadanos, para impulsar la educación sin fines de lucro, el Colegio Mochis se quedó en manos de la familia Zamora Gastélum, la cual aplica cuotas de inscripción y mensualidades solo al alcance de la clase pudiente o rica. El edificio y el terreno donde funciona la escuela privada tiene un valor catastral de poco más de 66 millones de pesos, lo que da una idea del millonario negocio.
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La familia Zamora compró 15 hectáreas de terreno en la Colonia Miguel Hidalgo (antes ejido Miguel Hidalgo), cuyo valor catastral es de más de 18 millones de pesos. En ese predio tienen planeado construir la Universidad privada. Una franja del terreno la rentan para la siembra y en el otro funciona una rústica “ciudad deportiva”.
El proyecto de construcción de la Universidad privada –Instituto de Estudios Superiores de Los Mochis A.C., – carcome el derecho de todos los alumnos a una educación gratuita y de calidad, consolida las desigualdades en la educación, lesiona las condiciones de trabajo y derechos de los docentes y otros trabajadores de la educación, y erosiona la toma de decisiones democrática y la rendición pública de cuentas en relación con la gobernanza de la educación.
Mario Zamora Gastélum, candidato del PRI-PAN-PRD (acceder para ver nota: Acusan a familia de Mario Zamora de mercantilizar la educación) agarró como bandera de su campaña el “rescate” de la Universidad Autónoma de Sinaloa, engañando a los sinaloenses, porque el Colegio Mochis y la futura Universidad de su familia representan una contradicción a los avances del presidente Andrés Manuel López Obrador en materia de gratuidad y acceso a la educación para todos y un riesgo para el sistema de educación pública y su capacidad de promover la democracia, la cohesión social y la equidad.
Atrás de los afanes “rescatistas” y “educadores” del abanderado del PRI-PAN-PRD, se esconde la ampliación de la apertura comercial de los servicios educativos en beneficio de su familia, en particular, el de la enseñanza superior, campo en el que desean incursionar de llegar Mario Zamora Gastélum a ocupar el gobierno del estado.
La Universidad Autónoma de Sinaloa y la Universidad “Benito Juárez” son un estorbo para los lucrativos negocios educativos de los Zamora.
