¡En la sombra de René Bejarano te veas! La senadora bejaranista, Imelda Castro Castro, no necesita votos para ganar una elección ya que su desafortunada “gestión” como legisladora termina el 2024. Vive de las mieles de la cosecha política al lado de René Bejarano –el señor de las ligas- y no necesita, por lo pronto, de más aliados políticos.
Imelda Castro es del equipo de René Bejarano acusado recientemente de mantener vínculos con la “mafia rumana” dedicada a la extorsión y a la clonación de tarjetas bancarias y a otros ilícitos.
El ex aspirante a la dirigencia nacional de Morena, Alejandro Rojas Díaz Durán, acusó al “angelito” de René – padrino de Imelda- y a su esposa Dolores Padierna de ser unos “personajes siniestros”.
“Los casos más escandalosos de indeseables son los de Dolores Padierna y René Bejarano, quienes encarnan todo lo contrario a lo que queremos los mexicanos del noble oficio de la política, porque ellos son y representan la corrupción, el clientelismo, el influyentismo, el amiguismo, el nepotismo, el corporativismo, el patrimonialismo, la perpetuación de los cargos, el tribalismo y el entreguismo”, apuntó Rojas.
Bejarano no ha ocupado ningún cargo público -su esposa, sus amigos y aliados sí-, desde los videoescándalo en 2004, cuando fue grabado recibiendo fajos de billetes del empresario Carlos Ahumada para financiar campañas del PRD a cambio de futuros contratos.
Las mezquindades de la Senadora
En las reuniones para concretar la alianza PAS-Morena (el orden de los factores no alterará la votación), el coordinador de la bancada de diputados color vino tino, Ignacio Mier, y el líder nacional de Morena, pidieron a las corrientes, expresiones o tribus de Morena, dejar a un lado las mezquindades para dar paso a la unidad que garantice el triunfo electoral.
La petición fue echada en saco roto por Imelda Castro. De genes perredistas, la Senadora que vive una relación política antinatura con René Bejarano, se desbordó, pues ella no necesita alianzas ni votos ni concurrirá a ninguna elección. Dijo que la alianza PAS-Morena es antinatura porque no profesan la misma ideología.
En el 2010, en calidad de “ilustre” perredista, Imelda y su amigo Juan Figueroa Fuentes (+) sellaron una alianza antinatura con el PAN-PRD-Convergencia (hoy MC). El triunfo de esa alianza le permitió acceder a un cargo menor en el gabinete estatal de Mario López Valdez
En su quehacer político, a lo largo de 8 años, el PAS ha propuesto las siguientes iniciativas de ley ante el Senado de la República: la revocación de mandato y segunda vuelta electoral, la disminución de prerrogativas a los partidos políticos y la eliminación del doble financiamiento, etcétera, que curiosamente – ¿o casualmente? – son iniciativas que ha venido empujando el presidente Andrés Manuel López Obrador y los diputados generales de Morena.
La Senadora Imelda Castro, en su mezquindad, no ve esas coincidencias PAS-Morena…
Los temores en Morena
Ni el video de las “ligas” ni la información periodística que lo vincula con “la mafia rumana” ha logrado acallar el temor que deambula en los chats entre morenistas: la banda de Bejarano lleva una relación antinatura con Morena y sigue exigiendo cínicamente posiciones.
Es ya toda una costumbre que, cuando se menciona el apellido Bejarano en presencia del presidente Andrés Manuel López Obrador, siempre insiste que él no establece “relaciones de complicidad con nadie” y que “El Señor de las Ligas” “ya pagó, ya estuvo en la cárcel”.
A pesar del descrédito frente a la población, las jugadas de Bejarano lo mantienen vigente en el entorno del movimiento de Izquierda, que no es de izquierda, tanto que sus maniobras hacen palidecer a la famosa “mafia rumana” que clonaba tarjetas y ahora es perseguida por la justicia.
